martes, 8 de agosto de 2017

La leyenda de la Champions

EL MADRID DESTROZA A LA JUVE EN UNA SEGUNDA PARTE MEMORABLE Y LOGRA LA DUODÉCIMA












La intención de las generaciones es dejar huella. Por eso a los mayores les duele cuando su bar del barrio de toda la vida se convierte de la noche a la mañana en una pastelería especializada en cupcakes veganos, cuando la panadería de la esquina ahora es un locutorio. Toda generación quiere dejar su huella, indeleble en el tiempo, una historia que poder visitar y recordar a los que vengan por detrás. Por eso el Real Madrid es una generación, única, desde su fundación hasta el pitido final de Cardiff. Por eso el Real Madrid no deja de ganar para volver a pisar encima de su propia huella. Y ya van doce veces.
El Real Madrid aterrizó más allá de la última frontera. Como siempre, fue pionero en Europa para lograr lo que nadie antes había logrado. Graba por segundo año consecutivo su nombre en la placa de campeón. Su forma de vivir es ganar y nunca está saciado. Destrozó a la Juve en una segunda parte memorable, para el recuerdo.
La Juve dio paladas de carbón desde el primer segundo. Puso la caldera a funcionar e intentó atropellar a un Madrid que se tomó el amanecer de la final sin despertador. La carga emocional obligaba a los italianos al galope, a quitarse la etiqueta de perdedor de finales y a sacarse aquella espina del 98. Los de enfrente confundieron experiencia con relajación.
En exceso. Los primeros esfuerzos del minutero por encontrar el siguiente dígito se tiñeron de bianconero y Keylor tuvo que volar con el ala desplegada para evitar el gol de Pjanic. Un paradón en el que había poco que celebrar y mucho con lo que preocuparse. El rival no era un muro defensivo, no era una tortuga encerrada en su caparazón, no era lo que la historia había instalado como un virus informático en la mente madridista. Era un equipo que hacía daño y que se quería medir a golpes con el Madrid.
Pero el Madrid no avisa, es el pistolero que se da la vuelta al oír "Nueve" y dispara mientras su rival en el duelo al sol intenta cumplir el décimo paso reglamentario. Una salida de balón rutinaria se convirtió en inyección letal. Modric y Casemiro mimaron el balón en la cuna, Kroos se lo llevó de marcha, Benzema encontró a Cristiano y el luso se la cedió a Carvajal con acuse de recibo. La devolución del lateral la mandó a la red Ronaldo con un derechazo al palo largo que se fue alejando del alcance de Buffon. Un golazo de los que se intentarán repetir en el patio del colegio el lunes.
Se contaba con que la Juve no es un muñeco de trapo que se rinda al primer golpe. Siguió apretando y tardó siete minutos en tomarse venganza. Higuaín tuvo demasiado tiempo para controlar un balón en dirección a un Mandzukic que tuvo demasiado tiempo para pensar, parar de pecho y sacarse una volea a la media vuelta que se coló en la escuadra contraria de Keylor. Un recordatorio: había rival.
El descanso sirvió al Madrid y al madridismo para plantarse ante una línea que le separaba de la gloria eterna. Una de esas oportunidades que no se pueden dejar pasar. La segunda parte fue memorable, un repaso histórico en el que convirtió a la gran Juve en un pelele en sus manos. Con Kroos y Modric a los mandos, con Isco pletórico y Benzema eufórico, pegó una lección de fútbol de las que se ven en todo el mundo, de las que asustan y dejan claro, a los ojos del planeta, que esta época es la del Real Madrid.
Casemiro abrió el camino con un zapatazo lejano que se coló junto al palo de Buffon, un disparo de esos que hacen salir un "Pero dónde vas" de las gargantas que queda ahogado por un grito de gol inmediato.
Y sin dar tiempo a la Juve a reaccionar, como se debe hacer, cuando el rival está aturdido, Cristiano fusiló a Buffon en una imagen icónica, la del vencedor sobre el caído, la de un duelo que se había prefabricado y que Ronaldo se encargó de reventar a su favor. Tiene otra Champions en el bolsillo, las mismas que Messi. Tiene encargado el quinto Balón de Oro, los mismos que Messi.
Asensio puso la puntilla dejando claro que tiene estrella y que la próxima generación tiene transfusión de sangre y gloria de las anteriores. Lo llevan en la camiseta, en el escudo, en el parche de la competición. Las seis Copas de Europa ya tienen seis Champions a su lado. El mejor equipo de la historia en blanco y negro es también el mejor equipo de la historia a color.


sábado, 28 de mayo de 2016

La Undécima más dramática

EL REAL MADRID SE LLEVA OTRA CHAMPIONS ANTE EL ATLÉTICO EN UN AGÓNICO PARTIDO QUE SE DECIDIÓ EN PENALTIS 
De la Décima a la Undécima va un número. El 4, el de Sergio Ramos, el del hombre que besó el cielo de Lisboa y conquistó el suelo de Milán. Como si el tiempo nunca hubiera pasado, como si el balón colgado fuese el mismo, da igual con la cabeza que con los tacos, pero siempre con el alma. El gol de Ramos, el gol de la final, el gol de la Décima, el gol de la Undécima. El hombre que levantó la Champions al cielo de San Siro, más que un héroe en la historia del Real Madrid.

Quien después de lo de Lisboa creyera que no había una forma más agónica de ganar una Champions o cruel de perderla no sabía lo que iba a pasar esta noche en San Siro. Para el Atlético es un sufrimiento continuado, no sólo por la tercera final consecutiva perdida entre tanta crueldad, es que el ladrón de las dos últimas Copas de Europa ha sido el eterno rival, el vecino del once.

El penalti de Juanfran al palo está en la historia negra del Manzanares. Él, que tanto había celebrado su lanzamiento contra el PSV, él, admirado y adorado en el Calderón, tuvo que ser el que negara la gloria a su equipo.

Falló, el único, y una milésima de segundo después Cristiano lo entendió todo. El máximo goleador de la historia del Real Madrid necesitaba una guinda al pastel. Dio un paso hacia el área, hacia el punto de penalti, hacia la retina de todos los madridistas del planeta, hacia la memoria del fútbol, hacia la Historia del Real Madrid. Marcó, venció, un grito recorrió la nación blanca, sin territorio pero con bandera, un "Goooooooool" de los que se atrancan en la garganta y acaban en gallo o lágrima. Un grito de campeón.

El partido fue tenso y pudo caer en los 90 minutos hacia cualquier lado. Bale, enchufadísimo, dio el primer susto con un zapatazo de falta que tocó Benzema y sacó Oblak, un hombre al que los milagros se le agotaron en la tanda de penaltis pero que fue gigante con la bola en juego.

Pero el Madrid avisa una y no más. En el 15' Kroos botó una falta que peinó Bale y que rozó con los tacos, en fuera de juego, Sergio Ramos. La bola se resbaló por el costado de Oblak y acabó en la red. Otra vez el de Camas, ahora capitán, otra foto de Champions.

Pudo matar el Madrid, pero empezó a cavar la trinchera y se escondió en ella. Donde antes tocaba y jugaba al escondite con la bola mientras el Atlético correteaba en un pilla-pilla sin premio, ahora eran los de Simeone los que dominaban y encerraban a los de Zidane. Pero hasta que en el descanso no salió Carrasco no cambió la historia.

Tardó un minuto el Atlético en demostrar que quería la Copa de Europa. Pepe derribó a Torres y el colegiado señaló penalti. Griezmann se acercó a la bola con la imagen de Keylor deteniendo su penalti en Liga en el Calderón y la reventó al larguero. Donde otro equipo se hubiera hundido, el equipo no dejó de creer, fiel a su creencia aunque con otro estilo. El Madrid le obligó a ser Barça y Bayern contra Atlético.

Perdonó el Madrid. Modric volvió a ser Baryshnikov mientras tuvo piernas para ello. Dejó a Benzema solo frente a Oblak, pero el galo se estrelló en un muro infranqueable. Como Cristiano, quien olvidó por un momento que las bicicletas son para el verano y no cuando puedes definir el 2-0 y finiquitar una final. Y la salida de Kroos dejó desequilibrado al Madrid.

Se acercaba el final y por la mente rojiblanca sólo pasaba una venganza de Lisboa con todas las de la ley. No fue lo mismo en el 93' que en el 79', pero el gol de Carrasco dejó tocado al Madrid y al madridismo, que se vino abajo pensando en todas las veces que ellos se habían reído del amigo, del vecino, del compañero de clase, temiendo ser ahora objeto de burla para la eternidad.

Pero el marcador no se movió hasta los penaltis y la historia se hizo Historia. Lucas, Marcelo, Bale, Ramos y Cristiano, cinco lanzamientos para siempre, cinco tiros que el madridismo recordará toda la vida. Había mucho en juego y muchas gargantas secas hasta el fallo de Juanfran.

Al Atlético no le quedará consuelo. La Liga de Campeones seguirá siendo su obsesión. En los manuales de la vida se dice que el amor es más intenso antes de consumarlo. En esos momentos en los que recuerdas el sabor a la miel de sus labios y sueñas con la siguiente dosis de su beso. El Atleti sigue enamorado de la Champions y no parará hasta levantarla en volandas.

Pero la historia es blanca. Una temporada que empezó 'Highway to hell' termina 'Stairway to heaven'. No, no iba a durar dos años. Sigue siendo posible que dure toda la vida. El madridismo dormirá en el Undécimo cielo.

sábado, 6 de junio de 2015

El Barcelona se corona campeón de Europa

Lo mas relevante Rakitic, Suárez y Neymar anotaron los goles. Morata Descuento Para La Juventus. El Barcelona gana su quinta Champions. 
               

La explosividad de Lionel Messi y el oportunismo de Luis Suárez rescataron al Barcelona cuando la final se le indigestaba, y el conjunto catalán se coronó por quinta vez en la Liga de Campeones de Europa al superar el sábado 3-1 a la Juventus.
Con un gol de Ivan Rakitic, Barcelona rompió muy pronto el planteamiento defensivo que la Juventus tenía en el libreto y tomó ventaja de 1-0. Pero Juventus igualó a los 54, mediante un tanto de Álvaro Morata.
Y en un momento de máxima tensión, Messi se buscó el espacio para disparar cruzado. El arquero Gianluigi Buffon, quien se había vestido de héroe en dos ocasiones anteriores durante el encuentro, no pudo quedarse con el balón, que le quedó servido a Suárez para marcar el tanto del triunfo y del título.
Neymar anotó el gol de la puntilla en los descuentos.
Barcelona alcanzó a Bayern Munich y Liverpool, con cinco cetros en el máximo certamen continental. Los supera el Milan con siete y el Real Madrid, que conquistó la décima copa en la final del año anterior.
El gol de vestuario conseguido por el Barsa se derivó de una estupenda jugada colectiva apenas a los tres minutos de la final disputada en Berlín. Neymar se escapó a la izquierda del área y sirvió a Andrés Iniesta, quien prolongó magistralmente el balón para que el croata empujara hacia las redes con un potente zurdazo.
Herida, la Juve buscó restablecer el orden atrás e intentó algunos ataques, más impetuosos que estructurados. En uno de ellos, el chileno Arturo Vidal disparó desviado desde fuera del área a los siete minutos. También se fueron por arriba posteriores tiros de larga distancia ejecutados por Álvaro Morata y Claudio Marchisio.
Con todo, fue el conjunto catalán el que tocó la puerta con mayor peligro en la primera mitad. A los 12 minutos, el arquero Juventino Gianluigi Buffon realizó una atajada providencial a un disparo de Dani Alves. Vencido ya a su derecha, el guardavalla alcanzó a reaccionar para lanzarse al otro costado, echarle mano al esférico y enviarlo por encima del arco.
En el arranque del segundo tiempo, Buffon prodigó otro lance de antología, desviando un tiro del uruguayo Suárez a primer palo.
A los 54, Morata consiguió la igualdad. Marchisio sirvió de taco para Stephan Lichtsteiner, quien filtró hacia el área para que Carlos Tevez disparara de media vuelta. El arquero Ter Stegen dejó el balón a la deriva en el área y el español Morata lo empujó a las redes.
La Juve cobró vida y dinamismo. El cotejo se volvió de ida y vuelta. Pero Messi se apareció.
El astro argentino se sacudió la marca de dos rivales por medio de un pique y una gambeta en el último cuarto de cancha y disparó desde las proximidades del balcón del área. Buffon falló esta vez, al no embolsarse el tiro cruzado, y el esférico le quedó apenas adelante a Suárez, quien no perdonó con su derechazo a los 67.
Neymar liquidó el encuentro al coronar un contraataque, cuando todo el conjunto italiano se lanzaba al frente en busca del tanto de último minuto.

sábado, 24 de mayo de 2014

¡La décima! Real Madrid es el campeón de la Champions League

UN GOL DE RAMOS EN EL 93' SALVÓ AL MADRID Y LE GUIÓ A LA GLORIA 


Del gol de Schwarzenbeck al de Ramos pasaron 40 años. Los atléticos que vivieron aquel drama tuvieron que recordar lo que todos querían enterrar con un triunfo en Lisboa. Esta vez, al Atleti le sobraron 2 minutos para ser campeón de Europa. No fue por culpa de un tiro lejano de un central alemán. Fue un cabezazo de un central sevillano, que se elevó a categoría de leyenda para el madridismo. En el 93'.

Real Madrid conquistó hoy su ansiada décima Champions League al vencer 4-1 al Atlético de Madrid en la final en un Estadio da Luz de Portugal totalmente repleto de hinchas españoles.

Sergio Ramos empató para el Madrid en el complemento, y Gareth Bale marcó el gol del triunfo a los 110 ante un Atlético que estuvo a instantes de levantar su primer trofeo de Champions League. Marcelo y Cristiano Ronaldo, de penal, sentenciaron en los tres últimos minutos.

El uruguayo Diego Godín anotó por el Atlético a los 36 minutos, ayudado del arquero madridista Iker Casillas que se equivocó al quedar a medio camino cuando salió a cortar un centro.

El Atlético buscaba un doblete histórico para la institución, luego de ganar la liga española la semana pasada en la última fecha del campeonato.

Diego Simeone, técnico del Atlético, apostó de entrada por el artillero Diego Costa, pero el hispano-brasileño demostró que no estaba recuperado de una lesión en un muslo y duró apenas nueve minutos en la cancha.

Los rojiblancos tampoco contaron con el volante turco Arda Turán, quien ni siquiera estuvo en la banca, mientras que por el Madrid el timonel Carlo Ancelotti no dispuso del central Pepe, reemplazado por Raphael Varane.


REAL MADRID 4 – 1 ATLÉTICO DE MADRID

Real Madrid: Casillas; Carvajal, Varane, Ramos, Coentrao (Marcelo, 58’); Modric, Khedira (Isco, 58’), Di María; Bale, Benzema (Morata, 79’) y Cristiano Ronaldo.
Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe Luis (Alderweireld, 83’); Raúl García (Sosa, 66’), Tiago, Gabi, Koke; Villa y Diego Costa (Adrián, 9’).
Árbitro: Kuipers (Holanda). Expulsó a Simeone (120’). Mostró tarjeta amarilla a los madridistas Sergio Ramos (26’), Khedira (45’) y Carvajal (89’); y a los rojiblancos Raúl García (26’), Miranda (52’), Villa (72’), Juanfran (74’), Koke (87’) y Gabi (99’).
GOLES:
0-1. 36’. Godín
 cabecea adelantándose a Casillas tras un pase de cabeza de Juanfran.
1-1. 93’. Sergio Ramos cabecea a la red un córner botado por Modric.
2-1. 110’. Bale cabecea a la red en el segundo palo un rechace de Courtois.
3-1. 117’. Marcelo marca desde el borde del área.
4-1. 119’. Cristiano Ronaldo, de penalti.

sábado, 25 de mayo de 2013

Bayern Múnich es campeón de la Champions tras vencer 2-1 al Dortmund

Arjen Robben dio el título a los bávaros a los 89 minutos. Pizarro fue suplente, pero ganó por primera vez el torneo europeo


El Bayern Múnich se impuso hoy al Borussia Dortmund en la primera final alemana en la historia de la “Liga de Campeones” gracias a un gol del holandés Arjen Robben a falta de dos minutos para la conclusión de un duelo brillante que parecía destinado a la prórroga (1-2). Tras perder la final del año pasado y la de 2010, el conjunto bávaro conquistó por fin en Londres la quinta Copa de Europa para sus vitrinas, un título que cierra con honores el ciclo de Jupp Heynckes al mando del Bayern antes de que el español Pep Guardiola tome las riendas la próxima temporada. El arquero Manuel Neuer salvó en más de una ocasión al Bayern ante los arrebatos del goleador Lewandowski, que desquiciaba a los centrales Boateng y Dante, si bien los de Heynckes también se habían presentado en el campo de batalla bien armados. Desenvainaron definitivamente las espadas al filo de la media hora, con un remate de cabeza de Mario Mandzukic y una llegada en solitario de Robben por la derecha que alarmaron seriamente por primera vez a Jürgen Klopp, que incluso con su equipo dominando el duelo no se sentó ni un minuto en el Robben y Rybéry burlaron la última línea de los de Klopp para que el holandés acabara trazando un centro desde la línea de fondo que Mandzukic remató a la red a puerta vacía. Por delante en el marcador, el Bayern parecía tener el duelo controlado y se disponía a dejar pasar cerca de su área la última media hora, pero la presión pudo en esta ocasión con el defensa Dante, que propinó una patada en el pecho a Marco Reus en el interior del área que arruinó la ventaja de los bávaros. El árbitro italiano Nicola Rizzoli perdonó la segunda amarilla al central, pero señaló un penalti que Ilkay Gündogan convirtió con un tiro seco hacia la izquierda del portero rival. Robben llegó en carrera en el minuto 88 al borde del área para llevarse un balón que los centrales del Borussia, demasiado blandos, se dejaron arrebatar, y encaró en solitario los últimos pasos para superar casi sin oposición al portero Weidenfeller y dar el golpe definitivo a una final vibrante.

 FICHA TÉCNICA:

 1 – Borussia Dortmund: Weidenfeller, Subotic, Bender (Sahin, m.90), Gündogan, Lewandowski, Reus, Hummels, Blaszczykowski (Schieber, m.90), Grosskreutz, Piszczek, Schmelzer.

 2 – Bayern Múnich: Neuer, Dante, Ribéry (Dias, m.90), Javi Martínez, Manzukic (Gómez, m.90), Robben, Boateng, Lahm, Müller, Alaba, Schweingsteiger. Goles: 0-1, m.60: Mandzukic. 1-1, m.68: Gündogan, de penalti. 1-2, m.88: Robben.

 Árbitro: Nicola Rizzoli (Italia). Amonestó a Dante y Ribéry (Bayern), así como a Groskreutz (Borussia) .

sábado, 19 de mayo de 2012

¡Conquistó Europa!: Chelsea se coronó campeón de la Champions al vencer por penales al Bayern Múnich

El equipo londinense venció 4-3 en la tanda desde los doce pasos y levantó su primer título de la Champions League
Chelsea se impuso 4-3 en la tanda de penales. Ganó 5-4 en el global.
En tiempo regular y extra, terminaron 1-1. Bayern Munich ganaba 1-0, pero los londinenses igualaron sobre el final del ST. En penales, Drogba metió el gol triunfal.
Múnich. Parecía una final aburrida, destinada sin remedio a los penales, tras 120 minutos de bostezos. Nadie imaginó que en los momentos finales del segundo tiempo, el partido se encendería.
Como era predecible, Bayern salió buscar el partido desde el inicio. Chelsea cuidó su arco en la mayor parte del partido. El partido era cerrado y con pocas ocasiones de gol.
El partido resucitó a los 82 minutos, cuando Müller venció a Cech con golpe de cabeza. Todo Múnich celebraba. Un gol casi a ocho minutos del final, no hacía presagiar lo que vendría después.
El predestinado Drogba, puso el empate a los 88’, con impresionante golpe de cabeza. El rostro de los alemanes reflejaba temor, quizá recordando aquella vez que el Manchester United les arrebató la corona en los minutos de descuento.
El partido se prolongó a los tiempos extras. Casi al inicio del primer tiempo suplementario, Drogba comete un penal innecesario. Bayern tenía el partido nuevamente a su merced, pero Robben falló o, mejor dicho, Cech atajó.
Bayern tenía la suerte de espaldas. El que le empatasen el partido sobre el final y el penal fallado, disminuyó su espíritu, no volvió a ser el mismo equipo entregado al ataque.
La tanda de penales, fue más que estresante. Mata falló el primer penal para el Chelsea, cuando Lahm había acertado el suyo. Otra vez Chelsea estaba contra las cuerdas, pero supo recuperarse.
Olic falló cuando el Bayern estaba 3-2. La metió Cole para empatar, luego falló Schweinsteiger y el siguiente penal, el que definía todo, era de Drogba. El marfileño no falló y celebró el título más importante de su carrera y también el de la historia del Chelsea. La Orejona se tiño de ‘Blue’.
Alineaciones:
Bayern Munich: Neuer, P. Lahm, Boateng, D. Contento, A. Robben, Schweinsteiger, Ribéry, Tymoshchuk, T. Kroos, M. Gomez, Müller.
Chelsea: Cech, Cole, Cahill, Bosingwa, David Luiz, R. Bertrand, Lampard, Obi Mikel, Drogba, Kalou, Mata.

sábado, 28 de mayo de 2011

Barcelona logró su cuarta Champions de la mano de Messi tras vencer 3-1 al Manchester

El equipo catalán ganó con goles de Pedro (27’), Messi (54’) y Villa (69’). Rooney había igualado transitoriamente a los 34’.
La victoria del Barcelona en la final de la Liga de Campeones ante el Manchester United (3-1) le ha supuesto sumar su cuarto cetro de la máxima competición continental e igualar en la historia de la competición a títulos con el Bayern de Munich y al Ajax de Amsterdam.

Los azulgranas han conseguido estos títulos en diecinueve años. El primero en 1992 se produjo, como el de hoy, en Wembley, frente al Sampdoria italiano (1-0), con un tanto de Ronald Koeman.

El segundo lo vivieron los barcelonistas en París, en 2006, en un partido en el que el equipo español remontó el gol inicial del Arsenal y ganó con tantos de Eto"o y de Belletti.

La tercera Copa de Europa llegó hace dos años en Roma, también ante el United. Volvió a marcar Samuel Eto"o y también, como hoy, Leo Messi.

La cuarta es la confirmación de que el Barcelona ya es un equipo de referencia. El próximo objetivo de los de Guardiola es igualar los cinco cetros del Liverpool (1977, 1978, 1981, 1984 y 2005).

El equipo con más títulos es el Real Madrid, con nueve Copas de Europa, la última de ellas en 2002, seguido por el AC Milán, cuyo último título data de 2007.
 
Ficha técnica:
 
Barcelona 3: Valdés; Alves (Puyol, m.88), Piqué, Mascherano, Abidal, Sergio, Xavi, Iniesta; Pedro (Afellay, m.92), Messi y Villa (Keita, m.86)

Manchester United 1: Van der Sar; Fabio (Nani, m.69), Ferdinand, Vidic, Evra; Valencia, Carrick (Scholes, m.76), Giggs, Park; Rooney y Javier ‘Chicharito’ Hernández.

Goles: 1-0, m.27: Pedro. 1-1, m. 34: Rooney. 2-1, m.54: Messi. 3-1, m.69: Villa.

Árbitro: Víktor Kassai (HUN). Mostró cartulina amarilla a Alves (m.60), Carrick (m.61), Valencia (m.79) y a Valdés (m.86).

Incidencias: Asistieron al encuentro 87.695 espectadores en la final de la Liga de Campeones disputada en el nuevo estadio de Wembley. En el palco de honor estaban presentes, entre otros el Príncipe de Asturias, el viceprimer ministro británico Nick Clegg y el presidente de la Comunidad de Cataluña, Artur Mas. También estaban en un lugar destacado el exentrenador barcelonista Johan Cruyff, así como Franz Beckenbauer y Fabio Capello, seleccionador de Inglaterra.